¡BIENVENIDOS AL BLOG DEL TALLER LITERARIO DESPERTARES!

Bienvenidos al blog del TALLER LITERARIO DESPERTARES de la Biblioteca Popular "Cultura y Progreso" de Morteros, Córdoba, República Argentina.

Este blog se inicia el 14 de junio de 2011 para publicar los trabajos de los participantes del taller, que funciona en la Biblioteca Popular "Cultura y Progreso".

Ilustración de la cabecera: "El desván de la memoria" de José Manzanares, creador de sueños, artista plástico de Linares, Jaén, España.

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sábado, 19 de junio de 2021

452. ACERTIJOS LITERARIOS

 



Acertijos literarios

1.- Menú fin de semana: ayer lentejas; hoy, duelos y quebrantos; mañana, palomino de añadidura. ¿Quién soy?


(ǝʇoɾınb uop 'ouɐɾınb osuolɐ)

ɐpuǝıɔɐɥ ns ǝp sǝʇɹɐd sǝɹʇ sɐl uɐíɯnsuoɔ 'soƃuıɯop sol ɐɹnpıpɐñɐ ǝp ouıɯolɐd uúƃlɐ 'sǝuɹǝıʌ sol sɐɾǝʇuɐl 'sopɐqás sol soʇuɐɹqǝnb ʎ solǝnp 'sǝɥɔou sáɯ sɐl uóɔıdlɐs 'oɹǝuɹɐɔ ǝnb ɐɔɐʌ sáɯ oƃlɐ ǝp ɐllo ɐun




2.- Si el mundo es tan reciente que muchas cosas carecen de nombre, y para mencionarlas hay que señalarlas con el dedo… ¿Dónde estoy?


(pɐpǝlos ǝp soñɐ uǝıɔ ˙opuoɔɐɯ) 

opǝp lǝ uoɔ sɐlɹɐlɐñǝs ǝnb ɐíqɐɥ sɐlɹɐuoıɔuǝɯ ɐɹɐd ʎ 'ǝɹqɯou ǝp uɐíɔǝɹɐɔ sɐsoɔ sɐɥɔnɯ ǝnb 'ǝʇuǝıɔǝɹ uɐʇ ɐɹǝ opunɯ lǝ ˙soɔıɹóʇsıɥǝɹd soʌǝnɥ oɯoɔ sǝɯɹouǝ ʎ sɐɔuɐlq 'sɐpılnd sɐɹpǝıd ǝp oɥɔǝl un ɹod uɐqɐʇıdıɔǝɹd ǝs ǝnb sɐuɐɟáıp sɐnƃɐ ǝp oíɹ un ǝp ɐllıɹo ɐl ɐ sɐpınɹʇsuoɔ ɐʌɐɹqɐñɐɔ ʎ oɹɹɐq ǝp sɐsɐɔ 02 ǝp ɐǝplɐ ɐun sǝɔuoʇuǝ ɐɹǝ opuoɔɐɯ



3.- Mis padres eran de Tejares -Salamanca-, tengo un hermanastro "negrito muy bonito" y nací dentro un río… ¿qué río?


(olıɹɐzɐl lǝ ˙sǝɯɹoʇ)



4.- Si emigré a América y me fue peor, por cambiar solamente de lugar y no de vida y costumbres… ¿cómo me llaman?


(uóɔsnq lǝ ˙solqɐd uop)

˙sǝɹqɯnʇsoɔ ʎ ɐpıʌ ǝp ou ʎ ɹɐƃnl ǝp ǝʇuǝɯɐlos ɐpnɯ uǝınb opɐʇsǝ ns ɐɹoɾǝɯ ɐɔunu sǝnd 'ǝʇɹɐd ɐpunƃǝs ɐl uǝ áɹǝʌ ˙pɯ ˙ʌ oɯoɔ 'ɹoǝd ǝɯǝnɟ ʎ ˙ǝʇɹǝns ıɯ ɐíɹɐɹoɾǝɯ ɐɹɹǝıʇ ʎ opunɯ opuɐpnɯ ıs ɹǝʌ ʎ ɐllǝ uoɔ sɐıpuı ɐ ǝɯɹɐsɐd ǝp 'lɐɾɐɹƃ ɐl uoɔ oɹǝɯıɹd olopuáʇlnsuoɔ 'éuıɯɹǝʇǝp 'ɹopɐɔǝd opɐuıʇsqo oɯoɔ 'opɐsuɐɔ ǝp ouıs 'opɹǝnɔ uɐʇ ʎos ou ǝnb 'opɐʇuǝɯɹɐɔsǝ ǝp ou 'ǝɯɹınƃǝsɹǝd uǝ ɐunʇɹoɟ ɐl sáɯ ʎ oıɔoƃǝu ǝʇsǝ oɥɔnɯ ɐqɐɹnp ǝnb ıʌ ǝnb oʎ



5.- Si después de muerta, solo nos queda su nombre… ¿Quién es el malo de la  novela?


("snɯǝuǝʇ ɐpnu ǝuɯou 'ǝuıɯou ɐuıʇsıɹd ɐsoɹ ʇɐʇs"

 ˙oɔǝ oʇɹǝqɯn ǝp 'ɐsoɹ ɐl ǝp ǝɹqɯou lǝ ˙soƃɹnq ǝp ǝƃɹoɾ ʎɐɹɟ)




6.- Fui corte en lejano siglo, soy muy noble, leal, heroica, y me gusta dormir la siesta. ¿En qué novela aparezco?


(opǝıʌo) ɐʇsnʇǝʌ sǝ pɐpnıɔ ɐl ˙uíɹɐlɔ ǝp 'ɐʇuǝƃǝɹ ɐl




7.- Estoy silenciosa y polvorienta en una esquina oscura del salón; mi dueña parece no acordarse de mí. ¿qué soy?


˙ɐdɹɐ lǝ ǝsɐíǝʌ

oʌlod ǝp ɐʇɹǝıqnɔ ʎ ɐsoıɔuǝlıs

'ɐpɐpıʌlo zǝʌ lɐʇ ɐñǝnp ns ǝp

'oɹnɔso olnƃuá lǝ uǝ uólɐs lǝp


˙ɹǝnbɔéq oɟlopɐ oʌɐʇsnƃ ǝp ııʌ ɐɯıɹ ˙ɐdɹɐ un



8.- ¿De qué era "el apretado bando que batió el aire rasando la copa de la encina en que se ocultaba"?


sǝʇuǝɔouı soʇuɐs sol ˙sǝqılǝp lǝnƃıɯ


˙ɐqɐʇlnɔo ǝs ǝnb uǝ ɐuıɔuǝ ɐl ǝp ɐdoɔ ɐl opuɐsɐɹ ǝɹıɐ lǝ óıʇɐq sɐʇıɹnz ǝp opuɐq opɐʇǝɹdɐ un 'ǝʇuɐʇsuı ǝsǝ uǝ 'ʎ 'ǝʇuǝɯɐɔıuáɔǝɯ ɐíʇǝdǝɹ 'ɐʇıuoq ɐuɐlıɯ 'ɐʇıuoq ɐuɐlıɯ



9.- Bajo mi seudónimo se ocultan dos de los grandes escritores latinoamericanos del siglo XX. ¿Cómo me llamo?

 sǝɹɐsɐɔ ʎoıq oɟlopɐ ʎ sǝƃɹoq sınl ǝƃɹoɾ uóɯılɐ lɐ uɐíqıɹɔsǝ ǝnb lǝ oɾɐq oɯıuópnǝsd


˙bɔǝɯop soʇsnq oıɹouoɥ

lɯʇɥ˙ʎoıq-ʎ-sǝƃɹoq-ǝp-ɐʇlnɔo-pɐpıʇuǝpı-ɐl/30/1102/ɯoɔ˙ʇodsƃolq˙soɹqılınbǝsǝp//:dʇʇɥ



10.- Swann marcó el camino de búsqueda; 14 años más tarde, recobré lo que había perdido. ¿Soy…?


˙ʇsnoɹd lǝɔɹɐɯ


"opıpɹǝd odɯǝıʇ lǝp ɐɔsnq uǝ" ǝp 'ǝʇuǝɯɐʌıʇɔǝdsǝɹ 'ɐʇsıuoƃɐʇoɹd ɐl ʎ ǝʇɹɐd ɐɯıʇlú ɐl '"ǝʇʇǝpo" n "opɐɹqoɔǝɹ odɯǝıʇ lǝ" ɹǝs opǝnd




11.- Escribió 1 novela y 1 libro de relatos. ¡Lea esa vaina, carajo, para que aprenda!, le dijo Mutis a García Márquez sobre él.


oɟlnɹ uɐnɾ



451. ESCRITORAS QUE USARON SEUDÓNIMO MASCULINO

 Escritoras que usaron seudónimo masculino

¿Qué lleva a una escritora a encubrir su condición femenina usando nombre masculino o denominaciones ambiguas? Cada una de las mujeres que han recurrido durante la historia a estos ardides ha tenido sus propias razones que, en general, tienen que ver con que creyeron que esa era la mejor -en ocasiones la única- manera de lograr la consideración, el respeto, la credibilidad y las oportunidades de las que solo gozaban los hombres: si vestías de hombre, las puertas se abrían y conseguías un trato y reconocimiento entre iguales; si firmabas como hombre, nadie despreciaría tu obra como una extravagancia pretenciosa o un desarreglo “histérico”.

Ejemplos hay muchos, por desgracia. Aquí vamos a desgranar solo algunos de ellos por contrastados.



"Fernán Caballero" era Cecilia Bohl de Faber


"Fernán Caballero" era Cecilia Bohl de Faber

Fernán Caballero (1796-1877) es en realidad un pueblo español de la comunidad de Castilla La Mancha, provincia de Ciudad Real. Y fue el nombre que escogió, casi por azar, Cecilia Böhl de Faber para publicar sus obras: según sus propias palabras, “mejor castizos calzones de Fernán que modestas faldas de Cecilia”. Cuando su marido le sugirió que escogiera un seudónimo si tal repugnancia tenía a ver con su verdadero nombre en letras de molde, esto fue lo que sucedió:

"En este apuro, cogí unos periódicos que había sobre la mesa para buscar un nombre cualquiera que pudiese evitar al mío propio el salir a la vergüenza pública, y encontré la relación de un asesinato cometido en un pueblecillo de la Mancha llamado Fernán Caballero (...)"

Gustóme este nombre, por su sabor antiguo y caballeresco, y sin titubear un momento lo envié a Madrid, trocando para el público mis modestas faldas de Cecilia por los castizos calzones de Fernán Caballero.

La Böhl de Faber pensaba que “la pluma, como la espada, se hizo para la fuerte mano del hombre”, y estaba de acuerdo con Zorrilla cuando decía que las “mujeres escritoras le cargaban”: “en eso soy completamente de su opinión, empezando por mí, por lo cual tomé un nombre masculino”.

La Cecilia mujer quiso crear el personaje masculino Fernán para dotarse de autoridad así que no es de extrañar su decepción cuando se descubrió su verdadera identidad poco tiempo después de comenzar a publicar:

…estoy muy llena de pena. Esta publicidad da un solemne mentís a toda mi demás vida, principios y máximas que han sido el que una mujer vale tanto más cuanto menos ruido mete y menos en boca se toma.

Sorprendente afirmación para una mujer que pretendió formar parte de la renovación de la novela, aunque, como se ve, en contradicción con sus convicciones personales respecto al papel de la mujer y a ciertas aspiraciones de notoriedad impropias de su condición.



"George Sand" era Amantine Aurore Dupin

"George Sand" era Amantine Aurore Dupin


George Sand (1804-1876) nació en París como Amantine Aurore Dupin. Apostaríamos, sin temor a equivocarnos (no demasiado, al menos) a que nuestros lectores difícilmente podrán enumerar alguna de sus numerosas obras, aunque, quizá, sí recuerden su relación con Chopin y la estancia de ambos en la isla de Mallorca en la Cartuja de Valldemosa, donde todavía es posible visitar el “domicilio familiar”.

La elección del alias de inequívocas referencia y sonoridad británicas bien podría responder, como dice Luis Antonio de Villena, a su “romántico propósito juvenil de esta mujer era ser una Byron femenina, una dandy (dandy era un término de uso exclusivamente masculino) y alguien, en suma, que quiso -contra los prejuicios de la época, contra la vetustez de las normas- edificar su propia vida. Ser ella. Nada lésbico hay en George Sand; si usó un nombre masculinizante y en su juventud se puso chistera y levita, es porque quiso significar y visualizar que sólo poniéndose en el sitio del hombre -ocupando su puesto- la mujer alcanzaría la culminación de sus derechos y posibilidades, se autorrealizaría. George Sand fue una adelantada, aunque terminó viviendo en el campo y siendo conocida, lejos ya de sus amoríos, como “la bonne dame de Nohant”.

Para Fiodor Dostoievski ocupaba “el primer lugar en las filas de los nuevos escritores”



 Currer, Ellis y Acton Bell eran Charlotte, Emily y Anna Brontë


                              "Currer, Ellis y Acton Bell" eran, en realidad, Charlotte, Emily y Anna Brontë

• Detrás de los nombres de los tres hermanos Currer, Ellis y Acton Bell se ocultaban en realidad Charlotte (1816-1855), Emily (1818-1848) y Anna (1820-1849) Brontë. Los seudónimos, al menos, mantienen la inicial de sus verdaderos nombres. Las tres hermanas demostraron desde pequeñas una vocación literaria innegable, como demuestran sus primeras creaciones juveniles y privadas aunque buen documentadas (junto a su hermano Branwell): Glass Town, Gondal y Angria. Estos primeros ejercicios creativos, que nada tienen que envidiar a los modernos juegos de rol, son los cimientos sobre los que se sustenta el talento literario de las hermanas Brontë, apoyado por sus abundantes y variadas lecturas que incluyen novela, poesía, prensa o la tan de moda literatura gótica. Todas estas influencias aparecerán en sus obras posteriores.

En 1847 comienza la publicación de las primeras obras en prosa de las hermanas. No sin dificultades, Charlotte publica Jane Eyre; Emily, Cumbres borrascosas; y Anna, Agnes Grey. Y las tres lo hacen bajo sus seudónimos Bell. El recibimiento de las obras fue desigual: solo Jane Eyre, tuvo un éxito instantáneo, lo que llevó a Charlotte a romper su anonimato. Emily falleció al año siguiente -el mismo que su hermano Brandwell- sin tener tiempo de escribir nada más; y Anna un año después, tras publicar, todavía como Acton Bell, La inquilina de Wilfred Hall, que fue una de las primeras obras en tratar temas tan actuales como la violencia de género. Charlotte fue la más longeva de la familia y publicó tres novelas más, una de ellas, póstuma.



"George Eliot" era Mary Ann Evans


"George Eliot" era Mary Ann Evans

George Eliot (1819-1880) era en realidad Mary Ann Evans y fue una mujer independiente y poco sujeta a los convencionalismos de la época victoriana. Toda su vida fue dueña de sus decisiones y de su destino.

Para distanciarse de la obra de las novelistas femeninas de su época (género al que no le tenía mucho aprecio) llegó a publicar en el Westminster Review en 1856, de forma anónima, eso sí, un ensayo titulado Silly novels by Lady Novelists (algo así como “Novelas tontas de mujeres novelistas”). 

En él, Eliot critica la mayoría de las novelas escritas por y para mujeres, tildándolas de estúpidas y alejadas de la realidad.

Sus argumentos: que estas “novelas tontas” en realidad perjudicaban enormemente la causa de la educación de las mujeres porque retrataban a protagonistas femeninas muy educadas pero autosatisfechas, aburridas y sumisas cuya máxima aspiración era un buen matrimonio y vida familiar; y que las autoras, muy leídas y cultas con seguridad, eran en realidad malas escritoras porque confundían "vaguedad por profundidad, exaltación por elocuencia y afectación por originalidad".

Eliot concluye que aquellos que lean este tipo de novelas llegarán a la conclusión de las mujeres no se benefician en absoluto de la educación.

Aunque también se aseguró de “librar de la quema” a algunas escritoras a las que calificó de geniales: Elizabeth Gaskell, Charlotte Brontë (Currer Bell) y Harriet Martineau.

Seguramente es en esta baja consideración de la novela donde podemos encontrar la explicación de que usara un pseudónimo masculino. Sin embargo, eso no impidió que sea considerada una de las mejores novelistas en lengua inglesa y, acaso, de toda la literatura. Atentos al dato: su primera novela, Adam Bede (1859), fue muy bien recibida pero cuando un año después se supo que en realidad era obra de una mujer, un periódico de crítica literaria cambió su primera opinión elogiosa por otra claramente negativa.

Según Virginia Wolf, su novela Middlemarch era “uno de los pocos libros ingleses escritos para adultos”.



Detrás de "Gregorio Martínez Sierra" estaba María de la O Lejárraga


Detrás de "Gregorio Martínez Sierra" estaba María de la O Lejárraga

• Detrás del éxito literario de Gregorio Martínez Sierra se encontraba en realidad el talento de su mujer, María de la O Lejárraga (1874-1974). No se trata de que María publicara con seudónimo, sino que las obras que publicaba su marido las escribía realmente ella. Y lo hizo en cumplimiento del juramento que se hizo a sí misma ante el fracaso y desprecio familiar de su primera obra: “nunca volveréis a ver mi nombre en la cubierta de un libro…”. Y cumplió su promesa. En lo sucesivo ocultará su autoría detrás del nombre o apellidos de Gregorio incluso después de la muerte de este. De todas formas, se aseguró de guardar cuidadosamente toda la correspondencia con Gregorio, en la que no solo se pone de manifiesto la realidad de la autoría sino la estrecha relación afectiva que siguieron manteniendo toda su vida a pesar de su temprana separación. En una de esas cartas, el propio Gregorio dejó por escrito:

"Declaro para todos los efectos legales que todas mis obras están escritas en colaboración con mi mujer Doña María de la O Lejárraga y Garcia. Y para que conste, firmo esta en Madrid, a 14 de abril de 1930".

A partir de la desaparición de Gregorio comenzó a firmar las obras con su nombre, a pesar de haber prometido no hacerlo, aunque usó siempre el apellido de casada.

… mantuve la promesa hasta la muerte de Gregorio. Ahora firmo mis libros, porque si no los firmo, no cobro; y si no cobro, no como.



"Isak Dinesen" era Karen Bixen


                                                             "Isak Dinesen" era Karen Bixen

Isak Dinesen (1885-1962) era Karen Bixen, más exactamente Karen Christence Blixen-Finecke. Dinesen era su apellido de nacimiento y el que utilizó como nombre artístico. En este caso estamos seguros (bastante seguros al menos) de que han visto-leído-oído hablar de Memorias de África. A ese referente nos remitimos pues se trata de una obra autobiográfica.

De nuevo, la elección del seudónimo masculino esconde el temor de que su obra no fuese objetivamente valorada por el hecho de ser mujer. Pero no nos podemos resistir a recomendar una de sus obras: El festín de Babette; simplemente deliciosa, en el doble sentido: si han leído la novela o visto la película entenderán el porqué la calificamos así.



"J.K. Rowling" y "Robert Gilbraith" Son Joanne Rowling


"J.K. Rowling" y "Robert Gilbraith" Son Joanne Rowling

• Más reciente y conocido es el caso de J.K. Rowling (1965-); Joanne (la K al parecer es en homenaje a la abuela paterna Kathleen) se ve que decidió seguir el consejo de su editor de ocultar su verdadero nombre bajo unas siglas para no espantar a los lectores masculinos, según lo explicó Rowling durante una entrevista:

"Mis editores, los que publicaron Harry Potter, me dijeron: 'Pensamos que este es un libro que atraerá a muchos niños y niñas. ¿Podríamos usar tus iniciales en vez de Joanne?` "

Esto sucedía a finales del siglo XX.

Cuando en 2012, terminada ya la saga de Harry Potter, publicó su primera novela para adultos, recurrió al pseudónimo masculino, esta vez Robert Galbraith, para tratar de eludir la fama previa. Como era de prever, la verdadera autoría no tardó en ser descubierta. Y volvió a usarlo en su siguiente novela, esta vez de género policiaco.


Coincidimos con Santiago Posteguillo en que el mérito de J.K. Rowling reside, fundamentalmente, en haber conseguido enganchar a la lectura a toda una generación de lectores jóvenes (y no tan jóvenes), que le han perdido el miedo al número de páginas de un libro.

Y para los vagos irredentos, también hay adaptaciones cinematográficas muy dignas.

Publicado 6th March 2020 por DesEquiLIBROS


http://desequilibros.blogspot.com/2020/03/escritoras-que-usaron-pseudonimo-masculino.html

viernes, 18 de junio de 2021

450. ESCRIBIR SOBRE LO QUE SE SABE

 


Escribir sobre lo que sabe

Un consejo que se oye mucho siendo un principiante en la escritura de novelas es: Debe escribir sobre lo que sabe. Es una de las claves para hacer que su ficción sea verdadera y viva. Pero, ¿cómo hacer eso y a la vez no escribir ficción autobiográfica? Tomar los datos de su vida y llamarlos novela no funciona. Lo que funciona es hacer uso de las experiencias de su vida pero no de una manera literal.


"Lo que no está escrito desde la experiencia no sirve para nada. Nunca debe escribir sobre lo que no sabe. No utilizar el material único que usted tiene en su posesión es una especie de suicidio".

John Braine Novelista inglés autor entre otras obras de Un lugar en la cumbre y Los endemoniados.




Use su conocimiento especializado

Si no hemos vivido nuestros años anteriores encerrados en un sótano, todos tenemos conocimiento especializado sobre algo, y a menudo sobre varias cosas. Tal vez para usted sea la apicultura, los comics de colección, la escalada o la odontología.


Cualquiera que sea el tema sobre el que está bien informado, no tenga miedo de incorporarlo en su novela. Es una de las mejores maneras que hay para escribir sobre lo que conocemos, porque le va a dar a su autoridad novela. Transfiérale sus conocimientos a uno de sus personajes y hágalo lucirse exponiéndolos (haciendo que tengan que ver con el argumento, por supuesto), o mejor aún haga que dos personajes sean los que saben sobre el tema y discutan o complementen sus conocimientos mientras se desarrolla la trama. Nunca cometa el error de creer que su conocimiento especializado, sea sobre lo que sea, es demasiado aburrido para una novela. La fotografía de pájaros puede parecer monótona y ordinaria para usted si lo ha estado haciendo toda su vida, pero va a ser fascinante para aquellos de nosotros que no sabemos nada al respecto, si la expone con verdadera pasión.


Use fragmentos de sus experiencias

Que levante la mano el que nunca ha tenido una relación romántica que terminó (casi siempre, si termina, termina mal). No muchos, apuesto. Es una experiencia común: enamorarse y luego de perder ese amor. Ahora bien, como ya he explicado, no es una buena idea escribir una novela sobre esa relación y simplemente cambiar los nombres. Escribir ficción puramente autobiográfica no es una buena idea artística, y no es una buena idea moral, porque habrá sentimientos de personas reales involucradas. Incluso si cambia los nombres, todavía se sabe quiénes son.

Así, con este romance fallido, ¿cómo aprovechar sus experiencias sin necesidad de escribir una autobiografía? Esa relación estará compuesta por innumerables fragmentos, y es perfectamente aceptable el uso de éstos en su ficción. Por ejemplo relatar la forma en que se enfermó por comer mariscos en mal estado durante su primera cita. La divertida lucha constante que había por controlar el mando de la tele, y cómo usted perdía siempre. Los últimos días de relación en que no podían soportar vivir en la misma casa, la forma en que comenzó a extrañarle cuando se fue.


Piense en estos fragmentos como pequeños azulejos de un mosaico enorme, el mosaico puede ser su novela. La forma de construir el mosaico de la ficción es usando algunos azulejos creados en su imaginación y algunos azulejos tomados de un sinnúmero de experiencias reales. Cualquiera que lo conozca lo suficiente podría ser capaz de reconocer un fragmento aquí y allá, pero las historias de ficción que creará seguirán siendo exactamente eso: ficción.


Utilice las verdades emocionales detrás de sus experiencias

Volviendo a la malograda relación romántica. Sabemos que escribir sobre los acontecimientos de una manera literal no va a funcionar, pero que tomar prestados pequeños fragmentos de la historia aquí y allá y trabajar con ellos en su ficción está bien. Pero hay distintas formas de utilizar esos fragmentos de experiencias pasadas. Además de que las escenas, los diálogos puedan servirle de inspiración, puede hacer uso de la esencia, de las emociones que la historia de la vida real le hizo sentir.


Todos sabemos (en mayor o menor medida) lo que se siente cuando una relación termina. La emoción que sentimos suele ser dolor… aunque a veces puede ser alivio. La forma precisa en que experimentamos esta emoción será diferente para cada uno de nosotros, lo que significa que si su novela muestra al lector cómo se ve el mundo a través de sus ojos, usted necesita plasmar en un papel exactamente cómo se siente el final de unas relaciones sentimentales desde su experiencia personal. La relación que se crea en su novela no constituirá ficción autobiográfica (salvo ese fragmento prestado aquí y allá), pero las emociones que sustentan los acontecimientos imaginados serán muy reales.


Otra forma de hacer uso de sus emociones reales es usarlas para ayudarle a imaginar cómo serían otras experiencias que nunca ha tenido.


Por ejemplo, (afortunadamente) no sé lo que se siente perder a un hijo. Puedo acercarme a ese sentimiento con mi imaginación. Pero quizás me ayude a estar más cerca de la persona que vive ese terrible acontecimiento y de lo que realmente debe sentir, aprovechar alguna experiencia similar aunque de distinta intensidad, como la muerte de un hermano, un abuelo o un amigo cercano. Yo no podría saber lo que se siente en la situación A. Pero sí sé lo que se siente en la situación B. Recordando B me ayuda a imaginar mejor A.


Escribir ficción autobiográfica puede ser tentador a primera vista, pero vas a tener un trabajo de mil demonios tratando de crear una historia con eventos que se niegan a seguir los principios de la narración. Mucho mejor es simplemente pedir prestado a su vida un fragmento de una experiencia aquí, una verdad emocional allí. De esa manera, usted puede escribir sobre lo que sabe manteniendo la historia que usted cuenta esencialmente ficticia.


Si “escribir sobre lo que sabe” significa incorporar fragmentos de su vida en su novela, ¿de dónde sale el resto? La mayor parte del material en la novela, donde todos esos fragmentos se integran viene, por supuesto de la imaginación.


Paul Valéry

https://escrilia.com/como-escribir-una-novela/las-ideas/escribir-sobre-lo-que-sabe/


miércoles, 16 de junio de 2021

449. ¡LAS METÁFORAS SON LA REINA DE LA POESÍA! ¡INVADIERON NUESTRO IDIOMA CON SU BELLEZA!

¿QUÉ ES UNA METÁFORA? 

Comenzamos con la definición del Diccionario de la RAE:

👉metáfora Del lat. metaphŏra, y este del gr. μεταφορά metaphorá.

1. f. Ret. Traslación del sentido recto de una voz a otro figurado, en virtud de una comparación tácita, como en las perlas del rocío, la primavera de la vida o refrenar las pasiones.

metáfora continuada (Una mujer con una balanza en una mano, una espada en la otra y los ojos vendados representa la justicia.)

👉1.f. Ret. alegoría (‖ plasmación en el discurso de un sentido recto y otro figurado).

 alegoría Del lat. allegorĭa, y este del gr. ἀλληγορία allēgoría. 1. f. Ficción en virtud de la cual un relato o una imagen representan o significan otra cosa diferente. 2. f. Obra o composición literaria o artística de sentido alegórico. 3. f. Ret. Plasmación en el discurso de un sentido recto y otro figurado, ambos completos, por medio de varias metáforas consecutivas, a fin de dar a entender una cosa expresando otra diferente.



👉METÁFORA quiere decir traslación: el significado de una palabra se emplea en un sentido que no le corresponde inicialmente. La metáfora tiene por base una dualidad y que significa algo distinto de lo que expresa lingüísticamente. Hay metáforas en las que es difícil advertir una actividad comparativa anterior. Por medio de la metáfora se manifiesta que las palabras no solo poseen su respectivo significado, sino también energías sugestivas, valores “sociales”, ideas secundarias de todo género, etc. La lengua empieza a resbalar y pierde su firmeza en el metaforismo oculto en el lenguaje. Los extranjeros se dan cuenta de su uso en el lenguaje cotidiano: romper el día, dar pie, dame una mano, se me durmió el brazo, muero de risa, etc.

Otra definición: La metáfora es una figura literaria en la que el significado de una cosa se traslada a otra, fabricando una relación de semejanza entre ambos términos.


👉¿Cómo se compone la metáfora?

Los dos elementos básicos de la metáfora son:

Elemento real, al que se está haciendo referencia en verdad.

Elemento imaginario, a través del cual se hace referencia al primero.

El fundamento entre estas dos entidades es la semejanza que se puede establecer, y allí está la virtud de los grandes autores, en el sentido de saber descubrir estas asociaciones.





 Metáforas cotidianas

Estas se manifiestan en expresiones que forman parte de la vida cotidiana, que ya están tan arraigadas en el uso diario que pocos se dan cuenta de que efectivamente se trata de frases metafóricas:

Lo mató con ese beso.

La noticia lo golpeó.

Sus palabras fuertes lo incendiaron.

Cuando leía, saltó una página del libro.

Su padre se armó de coraje para realizar ese esfuerzo.

Esa decisión lo colocó entre la espada y la pared.

Tocar el cielo con las manos.

Su hermano lo iluminó con sus consejos.

Su abuelo es un pozo de sabiduría.

Mi tiempo vale oro.

Me has robado bastante tiempo.

Me has robado una sonrisa.

Solo el tiempo lo dirá.

Con su  mirada, ha desnudado sus mentiras.

Vivir aquí es un paraíso.

El tiempo es un devorador.

Está hecho polvo.

Está reventado.

Tienes que ponerte las pilas para estudiar.

Has perdido un tornillo.

Esos políticos son unos buitres.

Ha fallecido, por lo menos ya podrá descansar.

Te queda un largo camino para crecer.

Eres un burro.

Tiene el ánimo por el piso.

Estas inmerso en un vacío.

Estás en la primavera de la vida.

Llegué volando.


Metáforas de amor

El ámbito del amor es muy propicio para el uso de la metáfora dada la grandeza del sentimiento, y la alegría y tristeza que puede provocar:


Perdió la cabeza por esa mujer.

Tiene el pecho enfermo de amor.

Mi corazón está en llamas.

Estoy loco por ella.

Su amor me hace perder la razón.

Hay mucha energía en esta relación.

El amor es un fuego.

Siente el fuego en sus caricias.

El amor es un viaje.

Está padeciendo el mal de amores.

Siento que tus besos queman.

Sintió el flechazo al mirarla.

Le ha roto el corazón en mil pedazos. 

Siente las mariposas en el estómago.

Está en las nubes desde que conoció a aquel chico.

Está tonto desde que la conoció.

Mi corazón salta de alegría.

Su corazón está a punto de estallar.

Su vida ha sido un infierno desde la ruptura.

Se le cortó la respiración al verlo. 


Metáforas en refranes

Los refranes transmiten la sabiduría popular y es de carácter sentencioso, es decir que tienen una enseñanza de tipo moral o quiere mostrar en ejemplo: 

No todo lo que brilla es oro.

Al que al cielo escupe, en la cara le cae.

Del dicho al hecho hay mucho trecho.

Cuando el río suena, piedras lleva. 

No sólo de pan vive el hombre.

Sobre gustos no hay disgustos. 

Quien mucho abarca, poco aprieta.

De tales bodas, tales costras.

Quien bien quiere a Beltrán, bien quiere a su can.

Quien se pica, ajos come.

No hay rosa sin espinas.

Poderoso caballero es don dinero.

No se hizo la miel para la boca del asno.

Aunque la mona se vista de seda, mona se queda.

Quien adelante no mira, atrás se queda.

Pájaro viejo no entra en jaula.

A caballo regalado no se le mira el diente. 

Palabras necias, oídos sordos.

Más sabe el diablo por viejo que por diablo.

Más vale ser cabeza de ratón que cola de león.

Mal de muchos, consuelo de tontos.

Entre sastres no se pagan hechuras.

Casa de herrero, azadón de palo. 

A rey muerto, rey puesto.

Después de la tempestad viene la calma.

Aún no ensillamos y ya cabalgamos.

Donde menos se piensa, salta la liebre.

A quien madruga, Dios le ayuda.

Le metieron gato por liebre.

A mal tiempo, buena cara.

Quien siembra vientos recoge tempestades.

A cada cerdo le llega su San Martín.

No se pueden pedir peras al olmo.

Un clavo saca a otro clavo.

Perro ladrador, poco mordedor.

Ojos que no ven, corazón que no siente.

Quien tiene tejado de vidrio, no tire piedras al de su vecino.

La cabra siempre tira al monte.

Más vale tarde que nunca.

Quien calla, otorga.

Cría cuervos y te sacarán los ojos,

Cada uno sabe dónde le aprieta el zapato.

Ladrón que roba ladrón tiene cien años de perdón.

En el país de los ciegos, el tuerto es rey.

Muerto el perro, se acabó la rabia.

Amor sin celos no lo dan los cielos.

Dios aprieta, pero no ahoga.

Agua pasada no mueve molinos.

De los cuarenta para arriba no te mojes la barriga.

En boca cerrada no entran moscas.

"Siembra un carácter y cosecharás un destino." —Charles Reade

"Créeme, en tu corazón brilla la estrella de tu destino." —Friedrich Schiller


Metáforas en la poesía

En la literatura la metáfora es donde obtiene su mayor expresión: 


"El cielo se deshace en rayos de oro." —Gustavo Adolfo Becquer 

"Ansiedad que partiste mi pecho a cuchillazos." —Pablo Neruda, Poema 11

"Sus lindos ojos de cielo en el horizonte fija." —Rosalía de Castro

"El viento me ha traído tu nombre en la mañana." —Antonio Machado

lunes, 7 de junio de 2021

448. TÉCNICAS Y TEMAS DEL OFICIO DE ESCRIBIR: ¿CÓMO ELEGIR AL NARRADOR?

 


Quienes escribimos tenemos que saber que el narrador se elige de acuerdo a lo que les pasa a los restantes personajes. Los personajes tienen determinadas sensaciones, sentimientos, visiones, pensamientos, diálogos, y se relacionan con otros personajes. Frente a cada uno de ellos variará la actitud tanto interna como externa del narrador. Nuestra elección dependerá, en gran medida, de esta cuestión.


👱El narrador puede:

Ø     Exponer los hechos;

Ø     describir a los otros personajes y su situación; 

Ø     opinar sobre lo que ocurre;

Ø     no opinar, sino observar;

Ø     anunciar el diálogo;

Ø     hablar de sí mismo;

Ø     mantenerse totalmente al margen de la historia.



👦Mostrar y expresar

En toda narración se pueden presentar los hechos de dos formas generales: expresar y mostrar. Es muy raro que se den ambas variantes por separado. La alternancia entre ambos modos es una de las características del género narrativo.

 Narrador 👉  Muestra +  Expresa = Cuenta

a) Mostrar. El narrador es un observador y relata a través de la presentación externa de personajes y decorados. Es decir, describe los rasgos característicos de los personajes y decorados, es decir, describe los rasgos característicos de los personajes, los paisajes, los ambientes, los objetos, etc.

A esta variante podríamos llamarla pictórica o panorámica. En la variante panorámica, desde cualquier punto de vista, más lejano o más cercano, desde fuera o desde dentro, el narrador expresa lo que ha visto o lo que ve.

Ejemplo: La primera puerta daría a un dormitorio, con el suelo cubierto por una moqueta clara. Una gran cama inglesa ocuparía todo el fondo. A la derecha, a cada lado de la ventana, dos estanterías estrechas y altas contendrían algunos libros incansablemente manejados, álbumes, barajas, botes, collares, baratijas”. Georges Perec, de Las Cosas

💁A la hora de escribir debemos elegir las observaciones de acuerdo a lo que queremos decir. En el ejemplo anterior, con el tipo de objetos banales y la clase de muebles elegidos el autor ironiza acerca de la sociedad de consumo.


b) Expresar. El narrador es un relator que dice lo que ocurre. Informa acerca de las acciones, explica los acontecimientos, así participe o no de ellos.

Ejemplo: “Miró el reloj. Debían de estar por delante unos veinte coches. No era ninguna exageración. Pero pensó que lo mejor sería ir primero a la oficina y dejar las vueltas para la tarde, ya lleno el depósito, sin preocupaciones. Bajó el cristal para llamar a un vendedor de periódicos que pasaba”.

José Saramago, de Casi un objeto

Al igual que en la variante anterior, de la elección y la sucesión de acciones, pensamientos y sensaciones dependerá lo que se quiera decir. La acción de mirar el reloj, en el fragmento precedente, indica ansiedad.


De la alternancia entre mostrar y expresar, resulta la acción de contar.

Ejemplo:

1. Mostrar

“Aquella primera tarde, cuando hube recorrido el paseo de gravilla que circundaba el campo de hockey, verde y embarrado, crucé un macizo de flores y me asomé a una de las aulas oscuras y desiertas. Era un día grisáceo, amarillento.”


2. Expresar

“Desesperación, una desesperación amarillenta y gris como su cielo. Y permanecí junto a la ventana, en la fría intemperie, pensando: ¿Qué va a ser de mí? ¿Por qué estoy aquí si es que puede saberse?”

Jean Rhys, de Debutantes a escena, por favor



Recapitulando…

1 El narrador es el que cuenta la historia. Elegir el narrador a la hora de contar es conveniente.

2 El narrador se manifiesta situándose desde un punto de vista determinado y hablando con un tono de voz.

3 El punto de vista puede ser desde fuera y desde dentro

4 Sin escritor no hay relato, pero cada escritor puede elegir entre innumerables narradores posibles.

5 El narrador ve y dice: ve desde un ángulo determinado y dice con un tono de voz.

6 El narrador dosifica la información que recibe el lector.



http://taller-d-escritura.blogspot.com/2012/02/tecnicas-y-temas-del-oficio-el-narrador_09.html


447. TÉCNICAS Y TEMAS DEL OFICIO DE ESCRIBIR: EL NARRADOR

EL NARRADOR 

Todos tenemos historias que contar. La manera de hacerlo las hace más o menos interesantes. En el origen de toda narración escrita hay un escritor de carne y hueso. Pero ese escritor no es el que habla en el relato, en el cuento, en la novela. Tiene a su disposición varios disfraces: son los distintos narradores que puede elegir a la hora de contar. No es el autor, sino un narrador, quien cuenta la historia. En el territorio de la ficción todo es posible. Admite nuestras ideas más extravagantes, los miedos, los amores. Con las herramientas apropiadas se puede construir un mundo a la medida de nuestro deseo. Conciso o extenso. Para conseguirlo, es fundamental elegir el tipo de narrador que contará los hechos. El autor da la palabra al narrador.


El escritor elige el narrador más conveniente

En nuestra mente habita una serie de apuntadores que nos dictan las cosas. Esas vocecitas podrían corresponder a algunos de los narradores a los que apelamos.

👀A la hora de escribir debemos preguntarnos:


👉¿Quién llevará la voz cantante?

El escrito es uno, los narradores a los que el escritor puede apelar son numerosos.

+¿Quién dice esto?, se preguntan los lectores frente a un relato. Cuanto más creíble les resulta la historia, más pronto surge esa curiosidad. Los niños suelen preguntarle a la abuela cuentista: “¿cómo lo sabes?, ¿ocurrió de verdad?”.

+¿Quién dice esto, quién lo cuenta? Esta cuestión atrae, hoy en día, tanto a los críticos y a los escritores como a los lectores.

+¿Quién habla en un relato? Es el narrador quien tiene la palabra en un relato. Sobre sus discurso se apoyan los monólogos y los diálogos de los personajes.


👉Un autor, numerosos narradores

Pero ese apuntador interno que  dice “yo” y se refiere a mí, no es necesariamente el escritor. El “yo” del cuento puede adoptar las características de personalidades muy diversas.


😍El “yo” del escritor no es el mismo “yo” del relato.😍


Un ejemplo. En Memorias de una vaca, de Bernardo Atxaga (seudónimo de José Irazu Garmendia Asteasu, 27 de julio de 1951), leemos:

“Por lo visto tenía que nacer, y acabé naciendo en un bosque del País Vasco a poco de terminar la guerra de 1936”.

No es el escritor quien  cuenta su nacimiento, por supuesto. El narrador de la novela no es Atxaga, sino un personaje inventado por él, en este caso una vaca. Los narradores son agentes a través de los cuales se expresa el autor.



El narrador es quien enuncia y no coincide con el autor del texto; si hay coincidencia se trata de una autobiografía y no de un relato novelado. Un ejemplo claro es el emblemático comienzo de El Quijote:

“En un lugar de La Mancha de cuyo nombre no quiero acordarme,”

No quiero acordarme”: lo dice el narrador ficticio y no Miguel de Cervantes, el autor. Gracias al narrador, podemos contar algo transformándonos en quien queramos: cambiar de sexo o de edad; de carácter o de clase social; de sentimientos o de época vivida.


Recordar:

Autor y narrador son cosas distintas. Hay infinidad de narradores entre los que escoger un tipo de voz narrativa. Cada uno aportará unas características distintas al texto.

Por eso, según lo que queramos contar, nos convendrá más utilizar uno u otro narrador



👧LAS VOCES DE JULIO CORTÁZAR

Si observamos el párrafo inicial de algunos de los cuentos de Cortázar, veremos que están enunciados por diferentes narradores, de acuerdo a las necesidades de cada historia y a la información que se desea transmitir al lector.


1.  Nos gustaba la casa porque aparte de espaciosa y antigua (hoy que las casas antiguas sucumben

a la más ventajosa liquidación de sus materiales), guardaba los recuerdos de nuestros  bisabuelos, el abuelo paterno, nuestros padres y toda la infancia

(de Casa Tomada)

¿Quiénes cuentan la historia?:

NOSOTROS corresponde a los hermanos, y el que cuenta es uno de ellos.


2.  Diario de Alina Reyes, 12 de enero

Anoche fue otra vez, yo tan cansada de pulseras y farándulas, de Pink champagne y la cara de      Renato Viñes, oh esa cara de foca balbuceante, de retrato de Dorian Gray a lo último

(de Lejana)

ALINA REYES cuenta en primera persona en su diario íntimo


3.  Así será algún día su estatua, piensa irónicamente el procónsul mientras alza el brazo, lo fija en el gesto del saludo, se deja petrificar por la ovación de un público que dos horas de circo y de calor no ha fatigado.

(de Todos los fuegos el fuego)

ALGUIEN cuenta lo que piensa el procónsul.


4. Me da lo mismo que me escuches o que no – dijo Somoza -.

Es así, y me parece justo que lo sepas.

(de El ídolo de las Cícladas)

Habla directamente SOMOZA.




http://taller-d-escritura.blogspot.com/2012/02/tecnicas-y-temas-del-oficio-el-narrador.html


446. PROPUESTAS PARA ESCRIBIR TEXTOS CREATIVOS

 
Integrantes del Taller Literario Despertares en la Biblioteca , 27-04-2021


Propuesta 1 – Los comienzos producen comienzos

+Responde al siguiente cuestionario. Desarrolla una o más de las respuestas para que se convierta en un texto más extenso. Tu texto puede ser en prosa o verso.

-¿Qué es lo primero que recuerdas?

-¿Cómo era la primera casa en que viviste?

-¿Adónde fuiste la primera vez que te alejaste de tu casa?

-¿Qué es lo primero que dibujaste?

-¿Cuál fue la primea narración que te contaron?

-¿Cuál fue la primera película que viste?

-¿Quién fue tu primer amigo?

-¿A quién le escribiste tu primera carta?


Propuesta 2 – Sin respetar la lógica 

+Hacer una lista de las acciones que observes en las personas que te rodeen, durante media hora en un espacio determinado. Apuntarlas.

-Numerar las acciones en un orden que no se corresponda con la lógica que podría conectarlas.

-Imaginar el tema del posible relato como consecuencia de la serie de acciones anteriores.


Propuesta 3 – A la caza de ideas

Escribir un texto a partir de la siguiente frase:

Hay ventanas para mirar hacia afuera y las hay para mirar hacia adentro...



Propuesta 4 – Aprovechar el material de otros escritores

Contaminar o mezclar elementos de tres fragmentos de autores distintos y escribir un texto que resulte de dicha combinación. Se pueden combinar sílabas, frases, ideas, etc. en el orden que se desee.






http://taller-d-escritura.blogspot.com/2012/02/secretos-y-recursos-de-la-creatividad.html

445. SUGERENCIAS PARA ESCRITORES II

 Secretos y recursos de la creatividad 

Recomendaciones para iniciarse en la escritura 

Recuperar historias orales

Recuperar las historias que nos contaron en alguna época de nuestra vida puede ser muy productivo. De hecho, lo ha sido para muchos escritores que han disfrutado en su infancia de los cuentos alrededor del fuego o cuando a la hora de dormir un padre o una abuela les narraban historias que se confundían con sus sueños. Años más tarde no sólo generaron en ellos la necesidad de escribir, sino que las recuperaron imponiéndoles un matiz personal. Así mismo, rescataron anécdotas, comentarios, diálogos escuchados tras las puertas y los enlazaron con otros inventados.

Recopilar anécdotas ajenas y apropiarse de algún detalle de cada una o de su totalidad 

                                                               

Practicar imitando

Durante el proceso de aprendizaje, se puede investigar cómo han llegado otros escritores a construir su texto. La lectura es una fuente inagotable de recursos para todo escritor, y la mejor escuela. El paso siguiente es desmontar los mecanismos que a uno le parezcan más interesantes como para reconstruirlos. Es decir, imitarlos.

Se trata de observar lúcidamente los modelos y dominar algunos ardides. Lo ideal es imitar un párrafo de un escritor y luego de otro y de otro y de otro, y así sucesivamente, a la búsqueda del estilo propio. Hacerlo con todo tipo de géneros, de estilos literarios y de escritores de todas las épocas.

Hay ejemplos de escritores que comprendieron cuál debía ser su estilo a partir de determinadas lecturas.

Para los expertos en otras lenguas, traducir es un ejercicio enriquecedor en este sentido. El oficio de muchos grandes escritores ha sido el de traductor.


Sugerencia

-Fusionar trozos o párrafos de diferentes textos escritos en diferentes estilos, hasta conseguir un texto que se sienta como propio.

Cualquier método para llegar a escribir es válido, si se consigue hacerlo. En cuanto a la búsqueda del estilo propio, diré que me gusta especialmente el párrafo “Practicar imitando” y aconsejo que se haga porque, aunque es fácil pensar “tal escritor me ha sorprendido o gustado especialmente su estilo, por tanto el mío debe ser parecido al suyo”, y a lo mejor esto es cierto, pero no descartemos el practicar otros, a lo mejor estamos más cómodos con otra manera de escribir.

-Coleccionar apuntes de todas las épocas.


Guardar todo

No desdeñar lo escrito en nuestros primeros tiempos de trabajo. El hombre es un ser temporal, y el paso del tiempo se mide por nuestras acciones y reacciones. Cada período de nuestra vida guarda una variedad de vivencias a menudo irrepetibles. En consecuencia, lo registrado en un momento determinado puede servirnos para caracterizar a un personaje. Es la “magdalena” de Proust, el detalle singular que le provoca a cada individuo la apertura de una compuerta, la punta de un hilo generador de material rico para ser trasformado estéticamente.

Por otra parte, a medida que aprendemos el oficio, aprendemos a recuperar aquello que nuestra inexperiencia consideró descartable.


Sugerencia


“La habilidad en expresar una idea es tan importante como la idea misma”.

 Aristóteles

 



Ítalo Calvino y los relatos orales

En el prólogo de El sendero de los nidos de araña, su primera novela, Ítalo Calvino explica cómo empezar a escribir puede ser consecuencia de lo escuchado oralmente

“Habíamos vivido la guerra y los más jóvenes (…) nos sentíamos vencedores (…) muchas cosas nacieron de aquel clima, incluso el tono de mis primeros cuentos y de mi primera novela.

El haber salido de una experiencia – guerra, guerra civil – que no había perdonado a nadie, establecía una inmediatez de comunicación entre el escritor y su público: nos encontrábamos cara a cara, cargados por igual de historias que contar, todos habíamos tenido la nuestra, todos habíamos vivido vidas irregulares, dramáticas, de aventuras, nos arrebatábamos la palabra de la boca. Al principio, la renacida libertad de hablar

Quien comenzaba entonces a escribir se encontraba, pues, tratando la misma materia que el narrador oral anónimo: a las historias que habíamos vivido personalmente o de las que habíamos sido espectadores, se añadían las que nos habían llegado ya como relatos, con una voz, una cadencia, una expresión mímica. Durante la guerra partisana las historias se transformaban apenas vividas y se transfiguraban en historias contadas por las noches en torno al fuego, iban adquiriendo un estilo, un lenguaje, un humor como de bravata, una búsqueda de efectos angustiosos o truculentos. Algunos de mis cuentos, algunas páginas de la novela tienen en su origen esa tradición oral recién nacida en los hechos, en el lenguaje”





¿Quiénes aconsejaron a Ezra Pound?

Cuando le preguntaron a Ezra Pound si alguien había sido lector de sus trabajos y lo había ayudado criticando o podando, Pound respondió:

“Aparte de Fordie (Ford Madox Ford) que se tiraba al suelo indecorosamente y se agarraba la cabeza con las manos y en una ocasión se puso a gemir, no creo que nadie me haya ayudado con mis manuscritos. Las cosas de Ford parecían demasiado extravagantes, pero él encabezó la lucha contra los arcaísmos. Me ayudó a conseguir un lenguaje sencillo y natural”.

(The Paris Review, 1953)

                                                                          



Desechar lectores sordos

No insistir en leer lo que hayamos escrito a quienes “no se lo merecen”. Buscar el público adecuado es un estímulo para escribir. Los lectores más apropiados son, en general, las personas que también escriben. No solo miran nuestros manuscritos desde un ángulo de comprensión, sino que pueden aportarnos nuevas ideas. Si es el mismo lector interesado el que nos sigue páginas tras páginas, el beneficio será doble, pues nos irá enseñando los cambios (positivos o negativos) a medida que transcurren los textos.


Atender a los matices

Cuando decimos que el escritor debe ser un observador exhaustivo, consideramos ineludible el valor de los matices en todos los campos. Lo podemos ver en unos poco ejemplos:

- En el campo de los sonidos:

Diferenciar un murmullo, de un susurro, de un rumor, etc.

- En el campo de las cualidades:

Diferenciar lo bonito de lo bello, de lo hermoso, de lo precioso, de lo primoroso, etc.

- En el campo del conocimiento:

Diferenciar lo comprensible de lo inteligible, de lo cognoscible, de lo identificable, etc.

- En el campo de las diferencias:

Diferenciar lo divergente de lo contrastante, de lo discrepante, etc


Sugerencia

"Probar las posibles gamas de cada término referido a un concepto".


domingo, 6 de junio de 2021

444. SUGERENCIAS PARA ESCRITORES I


 ¿Sabías que el deseo ineludible de escribir es el mejor pasaporte hacia el territorio de la escritura? 

En la práctica, es el único requisito indispensable.


¿Escribir en soledad o en medio de una multitud? ¿De pie o tumbado? ¿No pensar lo que se dice o no decir sin antes pensarlo? ¿Recurrir a la metáfora o rechazarla? ¿Hacer hablar al personaje o acallarlo? La lista de ejemplos es inagotable. Sin duda, tanto una fórmula como la contraria son válidas. La respuesta depende de cada caso. De cómo se escribe depende qué se escribe. Por lo tanto, conocer los secretos, las técnicas y los trucos del oficio nos aporta mayores posibilidades de encontrar nuevas vías y alimentar el proceso. He aquí unas cuantas sugerencias para ponerlo en marcha.



+Lanzarse a escribir se aprende escribiendo.

+Escribir en hojas o cuadernos durante diez minutos exactos cada día. Hacerlo durante un mes. Al cabo de cada mes (y por ninguna razón antes) leer lo apuntado. Dicha lectura constituirá una grata sorpresa para su autor. Dado que escribió asociando libremente, el material acopiado será heterogéneo y muy aprovechable para ser transformado en texto literario.

+Si nos agrada nuestra caligrafía, escribamos primero a mano, será un acto sensual. De lo contrario, las máquinas convierten nuestras ideas en parejos caracteres de libros. Por último, hablar escribiendo; es decir, echar mano de una grabadora es fructífero para algunos.

+En cualquier caso, los instrumentos nos predisponen a expresarnos. A veces, lo ideal es sentirlos como una prolongación de nuestro cuerpo. Para ello, no solo probar bolígrafos y plumas, sino tipos de hojas, pues también el papel motiva: la libreta grande o pequeña, rayada o cuadriculada, el folio reciclado, de colores o el blanco vacío en el que zambullirnos desconociendo el fondo, pero convencidos de que el viaje es lo que vale.

Comparar hasta conseguir un vínculo voluptuoso o placentero con el utensilio elegido para la escritura ya sea un lápiz, lapicera, birome, computadora, celular, etc..

+Reservarse una pared para la estantería de libros específicos. Ostentará el cartel: “Reservado, escritor” y allí habrá documentación para el trabajo del mes y de la semana; diccionarios; manuales de gramática y conjugaciones verbales; los libros preferidos, los de ideas y los clásicos.

+Crearse un espacio para escribir es un acto de reafirmación sana y que predispone a la escritura y,  seguramente, lo más cómodo será escribir en la computadora que, además, puede servir para consultas gramaticales, de ideas, etc… Y esto es cierto, pero no olvidemos que el acto de escribir es un acto de creación y debe hacerse, porque es como mejores resultados se obtienen, con las herramientas y en los espacios que nos hagan sentir más libres. 

No olvidemos que el escribir debe ser una acto de disfrute, nos tiene que gustar hacerlo. No descartar la escritura en un banco del parque o con pluma o lápiz o sobre papel que imite al papiro, antes de haberlo probado. Probar cualquier herramienta o lugar que se les venga a la mente. Verán que, de manera natural, acabarán eligiendo un sitio o sitios favoritos.

+No aferrarse a la lógica Seguir el hilo cronológico no es escribir creativamente. Escribir no es copiar la realidad en su orden cotidiano, sino transformarla. Imaginar lo que pudiera haber sido y no solo contar lo que es. Comenzar el texto por “se despertó”; continuar con: “se levantó de la cama”, “se lavó los dientes”, “se vistió”, “desayunó” y “salió a la calle”, es explicar o informar. Pero escribir literatura no es un pretexto para informar.

Lo significativo podría ser, por ejemplo, contar de qué modo ejecutó el personaje cada una de las acciones citadas, la manera personal de hacerlo.

Otra posibilidad favorable: saltear pasos lógicos, tergiversarlos, elidirlos/omitirlos.

Da buenos resultados escribir sobre lo que nos apasiona aunque pensemos que otros lo consideren absurdo, ser auténtico es más positivo que responder a lo “normal”. ¿Por qué ambientar el invierno con una chimenea o gruesas bufandas, si cada uno de nosotros acopiamos tantas otras imágenes que nos remiten al invierno, imágenes singulares que llamarán más la atención del lector?

Tengamos en cuenta que, si lo deseamos, en un relato se puede resucitar al que anteriormente habíamos matado. Uno es libre al escribir. De allí, entre otras cosas, proviene el placer.

+Las ideas están por todas partes. Trazarse un boceto de escritura “en ruta” y atrapar las ideas susceptibles de ser incorporadas a nuestra futura obra. Apuntar las sensaciones, los trozos de frases que se escuchan al pasar, lo que se observa.

+Describir lo que nos rodea, deteniéndose en detalles mínimos.

Salir por la mañana a registrar. Tomar nota de lo que cada día uno mira sin ver. Hacer lo mismo por la tarde y por la noche. Captar los matices de la luz en los mismos sitios. Curiosear, indagar, provocar, y seguir apuntando. Incluso, la fuente de nuestro registro puede ser la televisión o la radio.

Apuntar las sensaciones, los trozos de frases que se escuchan al pasar, lo que se observa.

+Con los elementos reales nos inventamos un mundo ficticio.

No hay limitaciones en cuanto a la elección de dichos elementos reales. EL objetivo es amueblar un mundo propio.

Al mismo tiempo, se hará el tamiz. Existen numerosas teorías acerca de cómo administrar las ideas en la escritura. La página vacía no tiene por qué intimidarnos. Un buen sistema para desarrollar ideas es partir de la impotencia ante el papel en blanco; de las dificultades para escribir: hablar de la impotencia y poner las dificultades a un personaje nos facilitará la tarea.

+La ansiedad no es buena consejera. Para encontrar las ideas hay que tener las antenas bien preparadas, estar abierto es el primer paso.

+Leyendo a otros se puede llegar a ideas para relatos propios o, como mínimo,  divertirse en el proceso.


+Reflexionar y preguntarse:¿Por qué escribo?” puede ser un disparador de la escritura.

¿Por qué se escribe?
- Para divertirse, para jugar con las palabras: combinarlas, romperlas, ordenarlas y desordenarlas

- Para ser eterno.

- Para comprenderse a uno mismo. Porque verbalmente no se consigue decir lo que se desea o se    siente. Además, lo escrito se puede rectificar; lo oral no.
 
- Para corregir la vida de uno.
 
- Para completar o inventar los mundos que deseábamos tener y no tuvimos. Reconstruimos en la página lo que no hemos podido vivir
 
- Para comunicarnos. En este sentido, se implica al lector. Suele suceder que un relato, un poema, una parábola, le revelan al lector algo que para el mismo permaneció oculto hasta el momento de la lectura.
  
- Para resolver conflictos. Escribir es una actividad semejante a soñar. Contaba Freud, cuando investigaba el mundo de los sueños, que había una vez un pueblo en el que todos los hombres estaban enamorados de la misma mujer. Hasta que un día, uno de ellos, un hombrecillo diminuto, amaneció diciendo que se sentía liberado de esa obsesión. Al indagar sus vecinos cómo lo había conseguido, les contó que esa noche había soñado que la mujer lo amaba. Así fue como el hombrecillo resolvió el conflicto. Idénticos resultados se pueden conseguir escribiendo.

-Por curiosidadimaginación nos pueden ayudar a desarrollarnos como escritores. 



Recapitulando…

Plan de trabajo para debutantes (y no tanto…)

1 Escribir cada día durante un tiempo fijo.

2 Manipular el lenguaje con los utensilios idóneos.

3 Encontrar un espacio físico apropiado.

 4 Transgredir la lógica y lo cronológico.

5 Dedicarse a la caza de ideas.

6 Aprender de otros.

7 No eliminar nuestros primeros textos.

8 Seleccionar lectores aptos.

9 Captar matices.



http://taller-d-escritura.blogspot.com/2012/01/secretos-y-recursos-de-la-creatividad.html


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